A propósito de lo que la propuesta de Constitución señala sobre acceso universal digital, reflexioné algunos puntos que son importantes para considerar:
1. La accesibilidad digital no es el futuro, es ahora. Ya no es un atributo opcional. Al igual que la usabilidad, la accesibilidad web debe ser incorporada en cada etapa cuando se diseña un producto digital, como plataformas e-learning, e-commerce, de Salud, financieras, educativas, entre otras.
2. No es exclusivo para los sitios web y tecnologías desarrolladas desde las reparticiones del Estado. Este atributo debe ser incorporado también por las organizaciones y empresas, si quieren ver mejoras en la usabilidad de sus productos y aumentar la cantidad de personas que llegan a interactuar y finalizar un proceso (la accesibilidad aporta también al negocio).
3. El acceso universal a las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC), como Internet y los contenidos digitales presentes en los espacios digitales, es un derecho fundamental que actualmente no se puede negar a nadie. Más aún, cuando a raíz de la pandemia del COVID-19 la demanda por realizar transacciones digitales aumentaron debido a la estadía por cuarentena en los hogares.
4. La accesibilidad aporta a mejorar los contenidos educativos que se generen y dispongan en la web, al acceso sin barreras a las plataformas de salud, financieras, e-commerce, entre otros, mejorando la calidad de vida de las personas en general al permitirles interactuar sin tener que vivir una experiencia usuaria frustrante. Cuando eso ocurre, la persona se mueve a otro sitio o aplicación que le entregue garantías para poder realizar el trámite que necesita hacer.
5. Por eso, la accesibilidad digital ya no es opcional, cualquier sitio web o aplicación deben ser construidos considerando altos estándares de accesibilidad para que cualquier persona pueda interactuar con dichos productos,
6. Además, la adopción e incorporación de la accesibilidad en distintos procesos y áreas de una organización o empresa, traerá beneficios para la marca, como por ejemplo: la ampliación del mercado atrayendo más personas usuarias (clientes), quienes fidelizarán con una marca que innova en sus procesos, que es comprometida, accesible e inclusiva.
7. Esto también aporta en la disminución de la tasa de rebote y a mejorar el SEO (posicionamiento en buscadores).
8. Finalmente, una marca o negocio que adopta la cultura de la accesibilidad digital
se convertirá sin duda en un referente dentro de la industria. Para ello, se pueden revisar las experiencias de Google, Microsoft y PlayStation en la materia.
Es así como se puede concluir que la accesibilidad digital no es solo un tema que beneficia a las personas con discapacidad, va mucho más allá, siendo una cuestión realmente inclusiva.
Carolina Aguilera Vigil
Periodista y especialista en accesibilidad digital
