Santiago, 11 de marzo de 2022.
Estimado Presidente,
Hoy acaba de asumir el reto de liderar nuestro país y confío que usted genere los cambios necesarios para que los derechos de las personas con discapacidad sean respetados de una vez por todas.
Desde su elección en diciembre pasado, he visto como muchas personas han ido conversado con usted, pero somos muchas las personas con discapacidad que no pudimos ir a “La Moneda Chica” a entregar una carta con nuestras necesidades, porque no contamos con los apoyos necesarios para acercarnos a esa reja y poder hablar un minuto con usted.
Por eso son estas palabras, en representación de casi tres millones de personas en Chile, el 16,7% de la población nacional, para comentarle que necesitamos ser considerados en las políticas públicas de forma efectiva y que nuestros derechos sean respetados.
Actualmente, en nuestro país existen brechas e inequidades importantes para todas las personas con discapacidad y que se han visto aumentadas producto de la pandemia del COVID-19. Por eso, necesitamos que su gestión tenga especial preocupación por nosotras, estableciendo acciones concretas para nuestra inclusión.
Es evidente que el país no es el mismo que hace 20 años, a principios de este milenio. Hemos avanzando en materia de discapacidad, pero aún falta tanto. Un ejemplo de ello es que existe una legislación para establecer medidas por nuestra inclusión y se ratificó la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad en 2008, sin embargo aún hay falencias que no nos dejan progresar con equidad.
Evidencia de lo anterior es que existen normas para que el transporte público sea inclusivo, pero en regiones muchas micros son antiguas y no son accesibles o Metro aún no arregla varios de los ascensores destruidos durante el estallido social. También, muchas niñas, niños y adolescentes con discapacidad viven constantes vulneraciones en diferentes lugares, como colegios y centros de salud, aún cuando se espera que sean espacios seguros para su desarrollo.
La salud es otro tema que nos afecta muchas veces, porque no existe presupuesto suficiente que considere nuestras necesidades, ni tampoco acciones claras que definan que contar con una salud digna es parte de nuestra inclusión.
La accesibilidad es otro tema importante que se debe considerar y está al debe. Pero esta debe ir más allá de las medidas de accesibilidad sobre entornos físicos, sino que también el acceso a la información es fundamental para que todas las personas con discapacidad accedamos lo que se quiere comunicar en igualdad. Muestra de ello es que los videos cuenten con intérprete de lengua de señas, subtitulado y audiodescripción.
Finalmente, lo que busco con esta carta es hacer ver que es necesario implementar medidas para todas las personas con discapacidad, porque todas buscamos lo mismo, nuestra inclusión social y participación en igualdad de condiciones en la sociedad. Es cierto que para alcanzar esta meta se requieren diferentes tipos de apoyos, pero eso no significa que queremos cosas diferentes. Una idea para partir, es que se nos respete y considere con un grupo importante de la población.
Espero que su gobierno implemente medidas reales y efectivas por nuestra inclusión.
Atentamente,
Una persona con discapacidad.
